Libros leídos

5 de noviembre de 2011

La inquilina de Wildfell Hall

Ya que no conseguí el libro (y hace años que estoy en su pesca), finalmente me decidí a mirar la miniserie de la BBC de La inquilina de Widfell Hall. No soy muy partidaria de mirar primero la adaptación cinematográfica, o en este caso televisiva de las novelas, porque suele condicionarme a la hora de leer el original. 


¡Me gustó muchísimo! No pude dejar de mirar hasta que terminé la serie completa (tampoco es tanto, son 3 capítulos), pero en mi caso, con un bebé de meses y trabajando, significa bastante. 
Me sorprendió en algunos aspectos, ciertas caraterísticas de los personajes, especialmente la protagonista. A ver, que es sumamente áspera y afilada con su lengua, con una personalidad muy fuerte, cosa que no esperaba y me alegra porque de damiselas victorianas pavotas e inútiles está llena la literatura, excepto Jane Eyre tal vez, lo cual me remite a la autora, una injustamente olvidada hermana Brönte que ha sido un hallazgo más que bienvenido. 


Agnes Grey sí lo leí y también me atrapó, lo considero de lectura indispensable para cualquier educador.


La inquilina de Wildfell Hall lo considero novela pendiente todavía, y la miniserie solo acicateó mi deseo por leerla, más que antes. Este es el argumento:

La novela versa sobre una mujer sola, con un niño pequeño, que llega a vivir a una mansión ruinosa en un aislamiento total. Esa mujer vive del trabajo de sus manos: es pintora y vende sus cuadros. Con ello subsiste sin apoyo de nada ni nadie. Un vecino, un joven laborioso agricultor se enamora de ella. Pronto las habladurías comienzan a correr. En realidad, esa mujer no es viuda... sino que ha abandonado a su marido. Ni siquiera es divorciada. Ha huído con su niño, en un contexto histórico donde las mujeres estaban totalmente despojadas de derechos: los maridos podían disponer de todo. Del dinero de su mujer, de su dignidad y, por supuesto, de los hijos.


En definitiva, una novela increíblemente actual. Para leer y reflexionar, amigos...

4 comentarios:

  1. El libro me hace escapar de este tiempo, un personaje principal con carácter y fuerza, y para mayor sorpresa, femenino, es cierto que parece áspera pero lo es por que ya tiene todo claro, vive en un mundo real, complejo y no evade la realidad por que puede afectar seriamente el futuro de su hijo, no da vuelta la mirada aceptando un marido vicioso.
    Por contraparte un personaje secundario, interesante que devela que la autora reconoce también las virtudes masculinas en Mr. Markham, el honor, el trabajo, y el amor.
    Esta mujer (Anne Brontë) vivió 29 años, y hace 163 años escribió esta novela donde se describen los mismos caracteres aunque mas desvencijados que hoy en día y claro, con un idioma mucho mas estropeado.....

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  2. cuando decís 163 años, cae como ladrillo, no? la de tiempo que pasó y sin embargo esta historia puede ubicarse en tiempo presente. cuantas mujeres hay sufriendo maltratos y prejuicios...
    y otras que como bien decís, dan vuelta la mirada aceptando un marido vicioso.
    pero la historia me pareció también llena de esperanza, de rebeldía y fortaleza, replanteando estereotipos. bah, eso percibí yo
    gracias anónimo por tu comentario, me hizo pensar

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  3. Qué buen blog... Quiero ver si también trabajan autores de filosofía.

    Muy buen material de consulta.

    Un abrasho a mi amiga Lushiana!

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  4. de filosofía todavía nada, estimado adrianófanes, nos hemos dedicado indecentemente a la ficción, y además novelas...
    gracias por las flores, que son siempre bien recibidas :)
    le estuvimos haciendo unas mejoras al blog para que resulte más fácil y atractivo de recorrer. espero que les guste. saludos

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Este es un Salón de Té, un lugar frecuentado por damas y caballeros, por lo tanto demostremos buenos modales y educación.

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